jueves, 27 de noviembre de 2008

De la Serie Humos



Aquí me encuentro en el borde del abismo más profundo ke hay, no veo el fondo pero mis sentidos me dicen ke es hondo, bien hondo, me intriga su profundidad, mis ganas de soltarme son increíbles y no puedo dejar de pensar en eso, cuanto?, cuan profundo puede ser?, se saldrá?
Ahí nomás la totalidad de mi ser se deja caer en busca de fondo,
el vuelo, si se puede llamar así, es cambiante de repente violento y abrupto y por momentos calmo y sereno, pero siempre en caída.
Voy conociendo estados saturados de aire enrarecido y sofocante, con una extraña sensación de paz y tranquilidad, calculo ke presiento a la muerte en cada una de mis caídas sin saber cuando llega el momento trágico del encuentro con el suelo, inesperadamente parece ke la caída no tiene fin y mi desesperación comienza con la tortura, la lejanía de la muerte la hace parecer inalcanzable y el final mi cráneo contra el suelo una solo un sueño de descanso, donde el dolor del golpe no es nada con respecto al sufrimiento de la caída, si , siempre el golpe es mejor ke la caída, la espera mas trágica ke el hecho, pero bueno creo ke ya lo sabemos todos y si alguien pasa por estas sensaciones solo le puedo decir ke se joda y aprenda a no soltarse

Una vez en el fondo mi cerebro esta desparramado en el suelo y mi cuerpo yace en un charco de sesos, aparentemente inmóvil con algo de vida pero escaso de energía empiezo a juntar lo ke queda de mi materia gris, acomodándola como puedo intento reconstruir lo ke fue mi cabeza sin saber ke solo después de eso tengo ge salir de este lugar, este lugar oscuro sin nada ni nadie mas ke un montón de recuerdos tristes y momentos de kaos, trato de calmarme y terminar de construir mi cerebro dejando afuera algunos de estos instantes vividos y así comienzo a moverme.
Primero: de rodillas, gateando cual cachorro con los ojos aun cerrados a lo ke vendrá, empezando a reconocer los ruidos y olores del lugar.
Segundo: ya con la mirada perdida empiezo a buscar la salida tratando de caminar erguido y tropezando con todo lo ke me rodea, así en medio de la oscuridad logro ver la luz como una estrella en la galaxia mas distante, entiendo ke la salida va a ser mas difícil de lo ke pensaba, de repente una extraña sensación aparece en mi, una comodidad inesperada a este tormentoso lugar, una calma en medio de la guerra, un acostumbramiento ke es tan trágico como la caída misma y así es como me siento a esperar a ke esa estrella distante se caiga y me aplaste de nuevo.

1 comentario:

rominachaile dijo...

que bueno pibito!!
lo felicito.